Periodismo


 «Li faig notar la sorprenent quantitat d'articles apareguts al llarg d'una època força dilatada, a vegades a un ritme de sis articles per setmana.»

Genís Sinca, Serra d'Or n° 574, octubre de 2007

Conviene recordar el artículo de Marc Andreu en el « Dossier Paco Candel », publicado en la Veu del Carrer, n° 90 de mayo-junio de 2005:

«Pero no sólo libros o informes editoriales: los trabajos periodísticos de Candel, próximos a las inquietudes del movimiento vecinal e introductorios de una generación de periodistas de local, han sido publicados en una larga lista de diarios y publicaciones. Entre ellos, los periódicos Pueblo, El Correo Catalán, Tele/Express (sic), Avui, Diario de Barcelona, El Periódico y La Vanguardia, y las revistas Juventud Obrera, Destino, Primer Acto, Inquietudes, ¡Avanzadas!, Canigó, La Pipironda, Agricultura y Economía, Arte Nuevo, Correo de la Radio, Canaletas, Hora Cero, Universitat, Montcada, Serra d’Or, Ondas, Rumbos, Agua, Siglo XX, Cuadernos de Arquitectura, La Marina y La Veu del Carrer

La lista dada por Marc Andreu no es exhaustiva. Francisco Candel también colaboró ocasional o regularmente con otros medios de los más diversos: Destino, Boletín de Libreros, Mundo Social, El País, Triunfo, Primera plana, Don balón, Penthouse, Zona84, Tintin (n°1), Crònica, El Món, Grama, Al Vent, Presencia, etc.


En la entrevista que le concedió a Montserrat Roig (Serra d'Or, mayo 1973), Candel aludió a sus colaboraciones periodísticas (Tele/eXprés, Ultima hora, de Mallorca) y precisó: «Esporàdicament escric a Cuadernos para el Diálogo, Informaciones

Candel se sirvió abundantemente de este material periodístico en muchos de sus libros. Periodista o cronista, lo cierto es que tenía sus seguidores en Barcelona y algunos analistas reconocen su influencia:

«El periodismo urbano, en su sentido moderno, fue, sin duda, iniciado en Barcelona por Francesc Candel (1925), especialmente a partir de la publicación de su novela Donde la ciudad cambia su nombre (1957). Su línea reivindicativa de periodismo de denuncia, conectada directamente con los movimientos vecinales, ha encontrado una continuidad posterior en periodistas más jóvenes, en casi todos los periódicos de la ciudad, entre los que destacan Josep M. Huertas (1939), Jaume Fabre o Rafael Pradas.» CARRERAS, Carles, La ciudad de Barcelona en la literatura catalana, in Anales de Geografía de la Universidad Complutense, n°15, Servicio de Publicaciones, Universidad Complutense. Madrid, 1995, p. 230

Candel, escritor y cronista. Esto es lo que afirma Jaume Fabre, en el artículo «Cronista de barri», El Periódico (19/01/2001):

«Hi ha escriptors que fabulen les seves novel·les en un territori concret: Juan Marsé, en una zona indefinida entre la Salut, el Carmel i el Guinardó; William Faulkner, en l'imaginari comtat meridional de Yoknapatawpha, i Francisco Candel, a l'altre costat de Montjuïc, als barris de l'antiga Marina de Sants, especialment el Port i el gairebé extint Can Tunis.»

Es una opinión que recuerda unas líneas de Manuel Vázquez Montalbán en su novela El pianista y que bien podría aplicarse a Francisco Candel:

«Saber expresarse, saber poner por escrito lo que uno piensa y siente es como poder enviar mensajes de náufrago dentro de una botella a la posteridad. Cada barrio debería tener un poeta y un cronista, al menos, para que dentro de muchos años, en unos museos especiales, las gentes pudieran revivir por medio de la memoria.»

El reporter, el periodista, el cronista, que diría Cela, el Francisco Candel, que diría el Candel, yo, en resumen, ha seguido, he seguido el paseo Agrícola, luego el del Hipódromo, luego las trochas y veredas que llevan a la Farola.

Francisco Candel, "Las playas libres. Un domingo por la mañana en Casa Antúnez", Destino, 9 de agosto de 1958.